Cuando una máquina no funciona bien, te envía una alerta. De la misma manera, tu cuerpo te indica cuándo algo no anda bien y generalmente se debe a tus hábitos alimenticios. Crees que estás comiendo bien? A continuación te explico cinco signos físicos que piden cambiar tu alimentación.
Tu cabello no luce sano y se cae con frecuencia
El estado de tu pelo refleja el tipo de alimentación que llevas, según la American Academy of Dermatology. Sus investigaciones han demostrado que tu cabellera puede verse afectada por la falta de nutrientes: ácido fólico o vitamina B12 que provocan que tu cabello luzca frágil o se caiga a mechones. Así mismo, la deficiencia de hierro (anemia), causa pérdida de cabello en una de cada 10 mujeres.
Tu piel está opaca
Los signos de una buena alimentación se notan rápidamente en el exterior. Por ejemplo, si te faltan ácidos grasos como el omega 3 o las vitaminas C y E, esto se manifiesta en forma de espinillas o piel grasosa.
Duermes mal
Te has dado cuenta si duermes lo necesario? Mantenerte despierto puede indicar una mala nutrición, según la Universidad de Pennsylvania. Analizaron los efectos de la alimentación en el sueño de más de cuatro mil personas y encontraron que quienes dormían poco (menos de seis horas por la noche) consumían menos variedad de alimentos en el día, mientras aquellos con una dieta balanceada tenían un patrón de sueño normal (de siete a ocho horas de sueño por la noche).
Te sientes muy cansado
Si incluso después de haber dormido bastante te sientes exhausto, ¡cuidado! Una mala alimentación puede hacer que tus energías se agoten rápidamente o que no las tengas. Por ejemplo, si no tomas suficiente agua, te sentirás deshidratado, o si solo consumes alimentos procesados; te mantendrás cansado por su alto nivel de azúcar, de acuerdo al Instituto de Investigación Cerebral de la Universidad de California (UCLA), en Los Ángeles. Es más, la comida chatarra también provocará que estés agotado física y mentalmente.
Te enfermas muy seguido
Una dieta pobre afectará también tu sistema inmunológico, por lo que te enfermarás frecuentemente. Por ello, para mantener fuertes tus defensas y evitar enfermedades, lo esencial es comer grandes cantidades de frutas, vegetales y granos enteros y pocas grasas saturadas, según indican expertos de la Escuela de Medicina de la Universidad de Harvard.
Dra. Pilar Ochoa
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